Perdida gestacional en reproducción asistida (II)

Pérdida gestacional (Aborto) en Reproducción Asistida (II)

En este artículo, continuación del publicado hace un par de semanas, vamos a seguir adentrándonos en la experiencia del aborto, desde la perspectiva de la pérdida, el duelo y el afrontamiento.
Si en el artículo anterior repasábamos aspectos generales del duelo alrededor de la pérdida gestacional, en esta ocasión, vamos a aterrizar en la reproducción asistida, ya que hay pequeños matices que hay que tener en cuenta de forma adicional.

El duelo durante los tratamientos de reproducción asistida

Además de los aspectos generales asociados a la pérdida gestacional, en las mujeres que se encuentran en tratamientos de reproducción asistida, se ha encontrado que la vivencia de la pérdida, emocionalmente, puede estar marcada por estos 9 items:

  1. Sentimiento profundo de pérdida y duelo (debido a tener que empezar de nuevo el proceso y asumir la posibilidad de no conseguir ser madre).
  2. Falta de control: sobre cómo conseguir continuar embarazada.
  3. Compartirlo con la pareja: quién puede ser una importante fuente de apoyo.
  4. Sentimiento de Injusticia: después de tanta lucha, experimentar la pérdida del ansiado objetivo.
  5. Pensamientos recurrentes sobre la pérdida.
  6. Incomodidad ante su entorno social: tanto por el desconocimiento del mismo del asunto, como por la sensación de que los demás no saben que decir, como por un entorno de embarazos y niños.
  7. Miedo a invertir en otro tratamiento de infertilidad.
  8. Necesidad de darle un sentido a lo ocurrido.
  9. Responsabilidad sobre la pérdida del embarazo: se atribuye la causas a factores propios, como la ansiedad, actividades específicas o ciertas acciones.

El duelo en soledad

Uno de los puntos que mencionamos anteriormente es la incomodidad ante el entorno social.
Al igual que sucede en la pérdida gestacional temprana, no todo el entorno social de las familias es conocedor de la situación, del embarazo incipiente o del tratamiento de reproducción asistida.
Si ya apuntábamos que la pérdida gestacional, en general, es un tipo de desautorizado, en el caso de los abortos en tratamientos de fertilidad, es una pérdida aún más invisible.
Para darle sentido a la pérdida uno de los aspectos más importantes es reconocerla, y que nuestro entorno no la reconozca (por no conocer la situación), hace que sea más complicado.
Este momento, dentro de los tratamientos de reproducción, puede ser el adecuado para plantearse compartir con la familia extendida o el entorno el proceso que se está siguiendo.

Embarazo después de pérdida

«Todo cambio implica una pérdida, de la misma manera que cualquier pérdida es imposible sin un cambio» (Robert Neimeyer).
Hemos insistido en que el afrontamiento es un proceso de crecimiento que hacemos después de una pérdida. Después de afrontar la pérdida no somos la misma persona que la sufrió, somos un «nuevo yo».
Por ese motivo, aunque algunas parejas tienen prisa para volver a intentar un embarazo, sobre todo, si era el primero, tenemos que desaconsejar un nuevo intento si no se cumplen 3 aspectos (Gary A Vogel, 1996):

• Que haya la suficiente distancia emocional como para poder hacer frente a otro embarazo y no quieran reemplazar al bebé muerto, es decir, que quieran tener otro hijo (diferente del primero).
• Que no sea el embarazo lo que de sentido a su vida, sino que sea otro proyecto más de sus vidas.
• Que tengan en cuenta que un nuevo embarazo será duro, y que tengan un buen sistema de apoyo en el siguiente embarazo.

En resumen, que el nuevo intento no es un sustituto del anterior, ya que el anterior tuvo una entidad propia, nos hizo crecer, avanzar, cambiar. Utilizar los nuevos intentos como sustitutos o reemplazos nos indica que el proceso de afrontamiento no se ha completado.

Consejos finales

  • El camino para ser madre no es lineal, inevitablemente conlleva altibajos, pérdidas, decisiones…
  • En el caso de la reproducción asistida las mujeres ya se enfrentan a la primera pérdida nada más comenzar, la pérdida de las expectativas, de la posibilidad de ser madre «de forma natural».
  • Durante estos procesos es habitual que se sucedan otras pérdidas, y hay que afrontarlas todas y cada una.
  • Es muy importante trabajar en conjunto, profesionales de la salud y familias, para generar un ambiente terapéutico de confianza.
  • Aunque cada pérdida es individual y personal los profesionales podemos ayudar, dar orientación, apoyo, acompañar, ya que hemos conocido a muchas familias en situaciones similares.
  • Los grupos de apoyo pueden ser una herramienta muy útil en este proceso.

Referencias

  • Miscarriage: worldwide reform of care is needed. The lancet; 397(0285):P1597. Mayo 2021
  • Miscarriage matters: the epidemiological, physical, psychological, and economic costs of early pregnancy loss. The lancet; 397(10285):p1658-1667. Mayo 2021
  • Recurrent miscarriage: evidence to accelerate action. The Lancet;397(10285):1675-1682. Mayo 2021.
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autora: Virginia López

Perdida gestacional en reproducción asistida (I)

Pérdida gestacional (Aborto) en Reproducción Asistida (I)

Continuamos con nuestra serie de artículos sobre la pérdida gestacional y el aborto en reproducción asistida.
En el post de la BetaHCG quisimos definir qué es lo que se considera embarazo, ya que tener un embarazo, aunque sea bioquímico, es un paso necesario para considerar que hemos sufrido una pérdida gestacional.
En este nuevo artículo vamos a adentrarnos en el fenómeno de la pérdida y el duelo después de un aborto. Intentaremos clarificar algunos aspectos generales y hablaremos del duelo, sus fases y cuáles son las reacciones normales ante la pérdida.

Pérdida gestacional

Dentro de la pérdida gestacional se podrían englobar tanto las tempranas, como un embarazo bioquímico, la aparición o detección de problemas de salud del feto, malformaciones, o la muerte del bebé en cualquier estadio del embarazo o postparto inmediato.

Desde un punto de vista psicológico estamos hablando de pérdidas, ya sea por la pérdida de la salud del bebé, por la pérdida de la imagen ideal de bebé o por la pérdida de la vida y los proyectos futuros.

Uno de los aspectos más importantes de las pérdidas gestacionales en reproducción asistida es la pérdida de unos planes de futuro, la pérdida de «ser padre o madre» (identidad), el no poder recibir y dar amor, la pérdida de un sentido de la vida y, a veces, la pérdida de la salud (como en casos que ha habido daños físicos). A veces la unión de todas esas pérdidas son las que convierten la pérdida en trauma.

Se dice que la pérdida de una gestación es una pérdida fuera de tiempo que los padres necesitan encajar. «Cuando no se encuentra el sentido, el trauma persiste» dicen Krosch y Shakespeare-Finch (2016). Cuando, como pasa en la mayoría de casos, no se sabe la causa; es fácil que las mujeres se autoproclamen culpables, y esta culpa es muy difícil de eliminar.

El duelo en el aborto

El apoyo social

Tenemos que tener en cuenta que este tipo de duelo es uno de los llamados «duelos desautorizados», ya que no tienen el reconocimiento social que suelen tener el resto de pérdidas y, por lo tanto, hay una falta importante de apoyo social.
Esto es muy importante porque va a dificultar cualquier proceso de adaptación.

Fases del duelo

Aunque parezca algo obvio conviene recordar cuáles son las fases del duelo. Existen diferentes clasificaciones, pero nosotros nos quedamos con estas.
1. Evitación: no poder aceptar la pérdida o lo sucedido, existe un fuerte deseo de resistirse a reconocer la situación. Ejemplo de esta reacción es la famosa frase de: «no puede ser».
2. Confrontación: la persona se enfrenta a la pérdida y reacciona emocionalmente.
3. Reajuste/adaptación/asimilación: la persona incorpora la pérdida a su vida y es capaz de volver a implicarse emocionalmente en su vida.

Reacciones normales del duelo ante un aborto

Cuando una persona se encuentra en un proceso de duelo es normal que experimente emociones y sensaciones físicas que podrían considerarse anormales en otras circunstancias. Tampoco es extraño manifestar conductas que no son las habituales en esa persona.

A continuación os resumimos en unas tablas cuáles son esas emociones, sensaciones y conductas que consideramos normales dentro del duelo. Conocerlas puede ayudar a identificarlas, en uno mismo y en las personas que han sufrido una pérdida a nuestro alrededor. Entender que estas reacciones son normales nos ayuda también a evitar la culpa por sentir lo que se siente.

Emociones:

  • Tristeza
  • Rabia: rabia por la frustración de no haber podido evitarlo
  • Culpa: La rabia puede desplazarse y convertirse en culpa: hacia uno mismo, hacia los demás (por ejemplo, las personas del entorno, los profesionales sanitarios).
  • Reprocharse algo de lo sucedido antes de la muerte (por ejemplo, en mujeres embarazadas es muy típico el culparse por no haberse cuidado, no haber cogido la baja o haber aceptado X responsabilidad).
  • Ansiedad/miedo
  • Embotamiento o sensación de bloqueo, sobre todo al principio. Aquí podríamos incluir también shock.
  • Sentimiento de soledad
  • Cansancio (como emoción)
  • Desamparo
  • Anhelo
  • Alivio (A veces en el caso de tener que enfrentarnos a un toma de decisión complicada y/o dolorosa que de esta manera se resuelve espontáneamente)

Sensaciones físicas

  • Vacío en el estómago
  • Opresión en el pecho/garganta
  • Dificultad para respirar
  • Debilidad muscular
  • Falta de energía (cansancio)
  • Sequedad de boca
  • Despersonalización (nada parece real).

Cognitivas:

  • Incredulidad (dentro de la fase de negación)
  • Confusión
  • Pensamientos obsesivos sobre el bebé
  • Sensación de presencia de la persona (sensación de náuseas gestacionales, sensación de movimientos uterinos de «sentirle»).
  • Alucinaciones (suelen ser transitorias)

Conductas

  • Trastornos del sueño (también sueños con el bebé).
  • Alteraciones del apetito
  • Dificultades de atención/concentración
  • Retraimiento social
  • Evitación de recuerdos del difunto.
  • Visitar lugares o tener/llevar objetos relacionados con la persona fallecida.
  • Hiperactivación del sistema nervioso
  • Llorar

Referencias

  • Miscarriage: worldwide reform of care is needed. The lancet; 397(0285):P1597. Mayo 2021
  • Miscarriage matters: the epidemiological, physical, psychological, and economic costs of early pregnancy loss. The lancet; 397(10285):p1658-1667. Mayo 2021
  • Recurrent miscarriage: evidence to accelerate action. The Lancet;397(10285):1675-1682. Mayo 2021.
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autora: Virginia López

Conservación de medicamentos en Reproducción Asistida

Conservación de medicamentos durante los tratamientos de reproducción asistida

Durante las visitas de preparación para los tratamientos de reproducción asistida, especialmente cuando las medicaciones comienzan a sumarse al régimen terapéutico, las familias manifiestan dudas sobre la conservación de estos productos.
En este post, que se engloba dentro de nuestro programa de seguridad del paciente y de educación para la salud, queremos ofreceros una herramienta para resolver dudas sobre la conservación de los medicamentos más utilizados durante los tratamientos de reproducción asistida.

Los errores de medicación

Se estima que los errores de medicación afectan a más de 1,5 millones cada año, con costes superiores a los 3,5 Billones de euros. Pero esta estimación se refiere a costes públicos y hospitalarios, no quedando representados en esta estadística los errores que suceden durante la autoadministración de medicamentos en los tratamientos de reproducción asistida.

En ocasiones las familias cometen errores en la conservación, preparación o administración de los medicamentos y, lamentablemente, estos errores tienen un impacto en los resultados de los tratamientos, ocasionando un gasto para las familias nada despreciable.

En otras ocasiones nisiquiera somos conscientes de estos errores debido a que no se ha recibido una adecuada educación sanitaria sobre el manejo de la medicación.

Generalidades

Caducidad de los medicamentos

-Caducidad: Se indica en el envase, nunca se debe utilizar un medicamento caducado aunque haya sido correctamente conservado. ¡Los medicamentos no son yogures!

-Duración: Cuando reconstituimos un medicamento o cuando utilizamos una pluma por primera vez, tenemos que anotar la fecha de apertura, desde ese momento ya no se puede tener en cuenta la fecha de caducidad del envase. La mayor parte de los fabricantes nos indicarán cuánto tiempo dura un fármaco después de abrirlo.

Presentación de los fármacos

Las formas de presentación más habituales son las siguientes:

-Polvo para inyección: Medicamentos que vienen con un vial con polvo y una jeringa o ampolla con líquido para disolver el medicamento. Nunca aceptes que te pauten este tipo de medicamentos sino te van a explicar cómo prepararlos.

-Jeringas precargadas: Son medicamentos que vienen ya preparados en jeringas, son de una sola dosis y no son reutilizables, los hay que viene con la aguja ya montada o por separado.

-Plumas precargadas: Son medicamentos que vienen en un dispositivo reutilizable en el que puedes indicar qué dosis quieres administrar.
Tenemos que tener en cuenta que si un fármaco requiere de cambiar de forma para administrarse, por ejemplo la reconstitución, cambiar de envase, etc, las condiciones de conservación también pueden cambiar.

Conservación en frío

Las neveras que utilizamos en las clínicas y farmacias nos garantizan la estabilidad de la temperatura entre 2 y 8 grados, hecho que contrasta con la enorme variabilidad de neveras que tenemos en nuestras casas.

Como norma general tenemos que intentar regular el termostato de la nevera a ese rango, las neveras que no tienen indicador de temperatura sino de potencia suelen tener una tabla de equivalencias en las instrucciones.

Desaconsejamos dos lugares de la nevera, el primero la puerta, ya que es el lugar con mayor inestabilidad térmica. En segundo lugar la parte de atrás de los estantes, ya que es la zona más fría y existe riesgo de congelación.

Tabla de consulta

Os queremos proporcionar una tabla de consulta para que podáis comprobar las condiciones de conservación de los medicamentos que vayáis a utilizar.
La tabla indica el nombre comercial, la presentación del fármaco, cómo debe conservarse antes de utilizarse y después de prepararse o iniciar el tratamiento, también indicamos cómo se afecta la caducidad una vez abierto.

Nombre comercialPresentaciónConservación inicialConservación reconstituidoNotas sobre caducidad
Bemfola
Jeringa precargada
2-8ºC
3 meses si ha estado a temperatura ambiente
Cetrotide
Polvo
2-8ºC
Uso inmediato
3 meses si ha estado a temperatura ambiente
Decapeptyl
Polvo
<25ºC
Uso inmediato
Elonva
Jeringa precargada
2-8ºC
2-8ºC
28 d si ha estado a temperatura ambiente
Gonal-f
Pluma precargada
2-8ºC
28 d desde apertura
Gonal-f
Polvo<25ºC
<25ºC
28 d desde apertura
Meriofert
Polvo
<25ºC
Uso inmediato
Orgalutran
Jeringa precargada
<25ºC
Ovitrelle
Pluma precargada
2-8ºC
Pergoveris
Polvo
<25ºC
<25ºC
28 d desde apertura
Pergoveris
Pluma precargada
2-8ºC
28 d desde apertura
Puregon
Pluma precargada
2-8ºC
3 meses si ha estado a temperatura ambiente

Referencias

  • Giménez, R. J. (2019). Enfermería En Reproducción Asistida: Manual práctico (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana,
  • SEF (2014). Farmacoterapia en medicina de la reproducción (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana.
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autor: Miguel García Fernández

Efectos secundarios durante la estimulación ovárica

Efectos secundarios durante los tratamientos de estimulación ovárica

Los tratamientos de reproducción asistida, especialmente la fecundación in vitro, implican, para la mujer que se somete a la estimulación ovárica, una importante carga de medicamentos y principios activos que actúan sobre el sistema hormonal.
Estos medicamentos, además de los efectos terapeuticos deseados, acarrean una serie de efectos secundarios que es importante conocer.
Una buena autogestión del régimen terapéutico implica no solamente saber pincharse la medicación, sino también saber reconocer los signos y síntomas de situaciones que deben ser comunicadas al equipo de salud.

Fármacos más utilizados durante la estimulación ovárica

Durante esta fase del tratamiento, vamos a utilizar 3 grupos de fármacos que, generalmente, van a ir incorporándose al mismo.
Hormona folículo-estimulante (FSH): Como ejemplo tenemos Gonal®, Elonva®, Bemfola®, Pergoveris® entre otros.
Antagonistas de GnRH: Cetrotide®, Orgalutran®
Agonistas del factor liberador de gonadotropinas: Decapeptyl®, procrin®
Gonadotropina coriónica humana (HCG): Ovitrelle®
Un tratamiento habitual comenzaría con una FSH, a la que se añadiría un antagonista de la GnRH, para terminar con un agonista del factor liberador de gonadotropinas o con HCG.
Ahora vamos a repasar los efectos secundarios más habituales de cada grupo de fármacos.

¿Porqué tantos efectos secundarios?

Podríamos decir que una parte de los efectos secundarios son debidos al efecto directo del medicamento en el organismo (dolores de cabeza) y otra parte son debidos al mismo efecto que buscamos con el tratamiento. Si queremos que los folículos crezcan vamos a tener un aumento de volumen en los ovarios que van a «apretar» al resto de órganos,esto puede provocar efectos gastrointestinales, por eso algunas mujeres tendrán diarrea, otras estreñimiento y otras gases.
Por otro lado están los efectos relacionados con la irritabilidad , el sueño, los cambios de humor… sinceramente, el tratamiento, más allá de la medicación, implica un desgaste personal, físico y mental, que en sí mismo ya justifica estos síntomas. Los vamos a contar como efectos de la medicación, pero podríamos decir que son efectos del tratamiento.

FSH: Hormona folículo estimulante

Efectos secundarios muy frecuentes

En un número muy importante de tratamientos las mujeres manifiestan tener dolores de cabeza, si eres propensa a migrañas y jaquecas debes avisar al equipo de salud para que estén atentos.
También es habitual que aparezcan reacciones locales («reacciones alérgicas») en el lugar de inyección, y es habitual terminar con algún hematoma.

Efectos secundarios frecuentes

El efecto que buscamos con estos medicamentos es aumentar el número de folículos que participan en el ciclo y, además, aumentar su tamaño. Esto genera un importante aumento en el volumen de los ovarios y, por lo tanto, un aumento en el volumen del abdomen y pelvis.
Vamos a encontrar un buen montón de síntomas asociados a este mecanismo que describimos como efectos secundarios frecuentes: distensión abdominal (hinchazón), dolor abdominal y pélvico, síntomas gastrointestinales (diarrea, vómitos, estreñimiento, gases).
Otros efectos secundarios serán los que clásicamente se asocian «a las hormonas»: Molestias mamarias, desde dolor a sensibilidad excesiva, sofocos, cambios de humor, cansancio e irritabilidad.

Efectos secundarios raros

De forma excepcional pueden aparecer reacciones alérgicas con síntomas respiratorios, empeoramiento de cuadros asmáticos, acné y erupciones cutáneas (fuera del lugar de inyección). Estas reacciones deben ser comunicadas inmediatamente al equipo de salud.

Antagonistas de la GnRH

Efectos secundarios muy frecuentes

Casi todas las mujeres nos comentan que presentan enrojecimiento, picor o sensación de calor en el punto de inyección inmediatamente después de ponerse la medicación. Si bien esta sensación desaparece en las horas posteriores.

Efectos secundarios frecuentes

Entremezclados con los efectos habituales de la FSH, dolor de cabeza, nauseas, malestar general.

Efectos secundarios raros

Reacciones alérgicas graves con síntomas respiratorios, hinchazón en cara, labios, lengua, habones, dificultad para respirar. Se manifiestan inmediatamente después de la primera dosis, requieren atención médica inmediata.

Agonistas del factor liberador de gonadotropinas

Efectos secundarios muy frecuentes

De nuevo se entremezclan con los efectos secundarios que se han venido sufriendo durante el tratamiento: Dolor de cabeza, cambios de humor, dificultad para dormir, dolor mamario, dolor en pelvis, sofocos.

Efectos secundarios frecuentes

Continuamos sumando efectos secundarios al tratamiento, en esta fase es posible que los ovarios hayan alcanzado el volumen máximo, por lo que, sino había aparecido ya, las mujeres noten distensión abdominal, dolor en la pelvis, gases, vómitos.
También podemos encontrar cambios de humor, irritabilidad, etc.

Efectos secundarios raros

De forma excepcional pueden aparecer hemorragias y alteraciones cardiacas. Por supuesto requieren intervención del equipo de salud.

HCG

Efectos secundarios muy frecuentes

Principalmente el sempiterno dolor de cabeza y las reacciones locales en la zona de punción.

Efectos secundarios frecuentes

De nuevo, posiblemente asociados al aumento de volumen de los ovarios, aparecen síntomas gastrointestinales. Diarrea, vómitos, gases.

Efectos secundarios raros

Reacciones alérgicas graves con síntomas respiratorios, hinchazón en cara, labios, lengua, habones, dificultad para respirar. Se manifiestan inmediatamente después de la primera dosis, requieren atención médica inmediata.

¿Cómo debemos actuar?

Insistimos en que un adecuado automanejo del régimen de medicación implica conocer los efectos que los fármacos tienen sobre nuestro organismo, aprender a identificar los efectos secundarios y el motivo de su aparición.
En cada visita de control es importante que se hable de los efectos secundarios, esto nos puede ayudar a identificar y poner solución precozmente a problemas que se pueden solucionar.
Nunca nos cansaremos de decir que las clínicas tenemos que poner a disposición de las familias material educativo para que las familias puedan repasar los conceptos que se enseñan en las consultas, por ejemplo nuestra EMBYgrafía sobre inyecciones subcutáneas, o nuestro canal de youtube con videos sobre medicación.
Es importante que las familias tengan disponible un teléfono de contacto para urgencias durante el tratamiento, para poder comunicar inmediatamente complicaciones y efectos graves, y así poder recibir consejo sobre cómo actuar.

Referencias

  • Weinig, R. M. & Remohí, J. (2015). Casos clínicos de reproducción asistida e infertilidad (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana.
  • SEF (2014). Farmacoterapia en medicina de la reproducción (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana.
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autora: Dra. Alicia Francos Pérez

EpS: Eje hormonal en reproducción asistida (I)

Educación para la salud: El eje hormonal (I)

Una de las preocupaciones que manifiestan las familias cuando comienzan un tratamiento de reproducción asistida es el miedo a equivocarse con el manejo de la medicación. Plumas, jeringas, viales, ampollas, FSH, “orangután”, son “palabros” nunca escuchados que de repente se hacen cotidianos.

El objetivo, cuando trabajamos con las familias el manejo del régimen terapéutico, es doble, por un lado tenemos que conseguir que no haya errores en la administración de los medicamentos, pero también tenemos que conseguir disminuir al mínimo el estrés y la ansiedad asociados a esta extraña situación.

Para ambos objetivos existe una herramienta común, el conocimiento. Un programa de educación para la salud (EpS) debe incorporar información accesible para las personas que reciben el programa, y por eso hoy vamos a dejar el diccionario de medicina a un lado y vamos a contar un cuento.

El cuento del eje hipotálamo-hipófisis-ovario

Había una vez, en un pueblito de Salamanca, un curilla que quería que su pequeña iglesia se llenara de feligreses, pero que no conseguía que vinieran más de dos o tres señoras.

Él se daba cuenta de que el sacristán, que era un viejito arisco y medio ciego, tocaba la campana para llamar a misa, pero que enseguida se bajaba del campanario y cerraba las puertas de la iglesia. -¿Se estarán quedando feligreses fuera?- se preguntaba el curilla.

Un día le dijo al sacristán. -Creo que tocas las campanas muy poco rato, si tocases más tiempo igual podía llegar el sonido a gente que se encuentra más lejos, también me he dado cuenta de que en cuanto entran dos o tres personas bajas corriendo a cerrar las puertas. El sacristán le contestó, – Padre, me preocupa que la iglesia se llene y que la gente se tenga que quedar de pie, y como soy medio ciego, en cuanto escucho el crujir de las tablas pienso que ya está la iglesia llena.

El curilla, viendo que el sacristán no tenía arreglo decidió buscar una solución para reunir a más gente en la iglesia. Entonces hizo una hoja dominical explicando los horarios de las misas y la repartió entre la gente del pueblo. Pasó entonces que el sacristán comenzó a tocar a misa, y muy rápidamente se había congregado una pequeña multitud. El sacristán, al escuchar el ruido de las pisadas, bajó los escalones del campanario de tres en tres y cerró las puertas. El curilla estaba muy contento porque ese día en misa ya no eran dos o tres, sino casi una decena de personas, pero al salir de la iglesia se dio cuenta de que afuera se habían quedado otras tantas personas que no habían podido entrar.

-Parece que los feligreses acuden tanto por el tañer de las campanas como por la hoja dominical que he repartido- pensó el curilla, – ¡pero este sacristán cierra las puertas muy rápido! ¿qué puedo hacer?

Llegó el verano y las fiestas del pueblo, y una noche de verbena el curilla vio al arisco sacristán sonriendo al lado de la orquesta en el baile. -Te veo muy contento. -Le espetó el curilla. -Es que me encanta la música. Contestó el sacristán.

– ¡Eureka! – Pensó, y al día siguiente se fue a la ciudad de compras. Antes de la siguiente misa el curilla subió al campanario y le dijo al sacristán. -Te he traído un regalo por todos los años de fiel servicio a la Iglesia.- Y le entregó un paquete con un ipod nuevecito. -He cargado un montón de canciones como las que te gustan.

El sacristán, emocionado, no esperó ni un segundo para ponerse los auriculares y comenzar a tocar las campanas al ritmo de la música, pero esta vez, distraído como estaba, no escuchaba los pasos de los feligreses, que despacio y en silencio llenaban banco tras banco de la iglesia.

-FIN-

eje hipotálamo hipofisis ovario

Resumen en términos sencillos

En cada ciclo ovárico varios folículos comienzan a crecer, pero enseguida hay uno o dos que destacan y que continúan adelante. Pero cuando vamos a hacer una fecundación in vitro no queremos quedarnos con esos dos, queremos aprovechar todos los folículos disponibles.
El hipotálamo (el sacristán) es una estructura del cerebro que segrega la GnRH, una hormona que estimula a la hipófisis (la campana) para que produzca diferentes hormonas, la LH y la FSH (el tañido de la campana), las cuales van al ovario y estimulan a los folículos (feligreses).
Durante los tratamientos de reproducción asistida vamos a administrar fármacos que contiene FSH y LH en diferentes presentaciones y formas, algunos nombres os sonarán, Pergoveris®, Gonal®, Elonva®, Bemfola®… (la hoja dominical), pero los folículos producen una hormona llamada estradiol (el ruido de las pisadas), y eso provoca que la hipófisis ordene la ovulación (cerrar las puertas de la iglesia).
Para poder alargar el tiempo de crecimiento de los folículos y que más folículos se puedan desarrollar tenemos que darles FSH, pero también tenemos que evitar que el estradiol informe a la hipófisis, para eso utilizamos los fármacos conocidos como antagonistas de la GnRH (el ipod), los nombres comerciales que os sonarán son el cetrotide® o el orgalutrán®.
Otro día os contaremos lo que le pasó al curilla cuando se dio cuenta de que la iglesia se le quedaba pequeña y tuvo que instalar un timbre (análogos de la GnRH, Ovitrelle®, decapeptyl®) para que el sacristán bajase a cerrar.

Referencias

  • Weinig, R. M. & Remohí, J. (2015). Casos clínicos de reproducción asistida e infertilidad (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana.
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autor: Miguel García Fernández

Betaespera en tratamientos de fertilidad

Betaespera, o qué esperar cuando estás esperando

La betaespera es el nombre que recibe comúnmente el periodo que pasa entre una inseminación artificial, o una transferencia de embriones, y el momento en el que se puede realizar una prueba de embarazo; muchas mujeres manifiestan que la betaespera fue uno de los momentos más angustiosos y de mayor estrés de todo el tratamiento de reproducción asistida. Con este post queremos daros unas pautas que os podrán ayudar a vivir, ese momento tan intenso de una forma lo más saludable posible.

Betaespera-equilibrio

En primer lugar… ¿qué es «la beta»?

Cuando hablamos de “beta” nos referimos a la fracción beta de la gonadotropina coriónica humana (hCG), una glicoproteína que es secretada por las células del trofoblasto del embrión, desde los primeros momentos de la implantación.
Es un excelente marcador del embarazo, ya que aumenta rápidamente desde la implantación, duplicando su valor cada 48-72 horas en las primeras semanas de gestación.
La beta tiene como función estimular al cuerpo lúteo, para evitar su desaparición, haciendo que éste siga fabricando progesterona, hormona imprescindible para la gestación. Alrededor del tercer mes de gestación es la placenta la que proporciona la progesterona, por lo que la beta deja de tener importancia y disminuye sus niveles.
¡Ah! La beta también es la responsable de las nauseas durante el primer trimestre.
En las clínicas de reproducción asistida medimos la b-hCG alrededor de 10-12 días después de la transferencia o inseminación. Esta prueba requiere una extracción de sangre y se obtienen los resultados en menos de una hora.

De donde vengo, a donde voy

Tenemos que tener en cuenta el momento en el que se desarrolla la betaespera en relación al tratamiento de fertilidad. Generalmente la betaespera viene precedida de una fase del tratamiento muy física; la estimulación, con medicación inyectada a diario, pasar por el quirófano para la punción folicular, los 5 días de reportes sobre el estado de los embriones, la toma de decisiones sobre qué embrión transferir, y finalmente la transferencia.
De alguna forma podríamos decir que hemos hecho una maratón de montaña, con subidas y bajadas, con tramos complicadísimos y, de repente, nos quedamos quietos, esperamos a ver que pasa, mientras que la inercia del tratamiento nos empuja a seguir haciendo.
Por otra parte, desde las clínicas, es un momento de cierto abandono, o al menos así pueden sentirse las familias, ya que durante las semanas anteriores nos hemos visto casi a diario, hemos hablado por teléfono, respondido dudas… y ¿ahora qué? Pues desde las clínicas también esperamos que pasen esos 10 días para poder saber qué ha sucedido.

Emociones en una balanza

La betaespera es un periodo en el que tenemos que mantener un equilibrio emocional, porque tras la misma llega una encrucijada, el positivo o el negativo. Todos los tratamientos de reproducción asistida tienen un porcentaje de efectividad, por lo que en ese porcentaje funcionarán, pero en el otro fracasarán.
Por ese motivo la betaespera debe ser un momento de preparación, tanto para lo bueno como para lo malo. Hablamos de equilibrio porque no consiste en anticipar un resultado negativo y prepararnos emocionalmente para el golpe, pero tampoco consiste en vivir en una euforia descontrolada o hacernos ilusiones que en el caso de no cumplirse nuestro deseo nos llevarán a sufrir un gran daño.

Betaespera

1. Continúa en la ola.

Habíamos dicho que la betaespera nos sitúa en una parada total de máquinas después de un periodo muy intenso y físico del tratamiento. Intenta que esta parada no sea total, mantén alguna de las rutinas que habías instaurado durante la estimulación folicular, busca darle continuidad al proceso de tal forma que la betaespera sea una continuación de las fases anteriores.

2. Trabaja

Durante la fase de estimulación la mujer tiene una gran responsabilidad sobre el tratamiento, de que ella maneje adecuadamente el régimen terapéutico depende que la estimulación vaya bien, hay un objetivo y una motivación para trabajar. En esta fase tenemos que conseguir esa misma sensación de empoderamiento sobre el proceso. Pequeñas responsabilidades pueden situarnos en una posición proactiva en la betaespera, por ejemplo. Cuidar la alimentación, mantén una dieta equilibrada y rica en antioxidantes, de la misma forma que la mantuviste anteriormente, todavía no hemos llegado a la meta. Haz ejercicio, siempre se recomienda reposo relativo la tarde tras la transferencia, pero pasado ese tiempo podemos mantener una vida activa normal, no renuncies a actividades recreativas y al ejercicio al aire libre, camina al menos media hora al día.

3. Mens sana

En EMBY recomendamos utilizar un diario de tratamiento para anotar lo que sentimos y experimentamos durante el mismo, pero también para hacernos conscientes de las cosas que podemos controlar, nuestras responsabilidades, y de aquellas que escapan a nuestro control. Hacernos conscientes de esto nos ayuda a identificar oportunidades, para trabajar en pos de nuestro objetivo, y estresores, que nos hacen sufrir. Debemos tener como objetivo volcarnos en las cosas que dependen de nosotras y controlamos, e intentar dejar en un segundo plano aquello que no podemos controlar.

4. No ser negativas… bueno, solo un poco

Tenemos que tener en cuenta en todo momento que un resultado negativo es una posibilidad, y prepararnos para ella. Podemos entender un resultado negativo como una pérdida, la pérdida de una esperanza, de una ilusión, y después de una pérdida llega el duelo, el periodo en el que afrontamos esa pérdida. Las estrategias y medidas que adoptamos para gestionar una pérdida son el afrontamiento. Cada persona tiene un estilo de afrontamiento diferente, que depende de las pérdidas previas, de su bagaje personal, etc. En EMBY le damos mucha importancia y por eso incluimos la valoración del mismo en las pruebas psicológicas iniciales que os ofrecemos. Las mismas estrategias de afrontamiento que podemos utilizar para afrontar el negativo nos pueden ayudar a prepararnos para esa posibilidad. En función de tu estilo de afrontamiento te podemos sugerir actividades y estrategias personalizadas para ti.

5. Ilusiónate

Porque al fin y al cabo… ¿para qué hacemos todo esto? Por una ilusión, por que queremos una nueva vida. Nadie dijo que fuera fácil, y además ¿quién sino tú puede superar la betaespera?

Referencias

  • Boivin, J., & Takefman, J. E. (1995). Stress level across stages of in vitro fertilization in subsequently pregnant and nonpregnant women. Fertility and sterility, 64(4), 802-810.
  • Salvatori, P., Andrei, F., Cipriani, L., Damiano, G., Dirodi, M., Labriola, F. S., … & Porcu, E. (2021). Effects os psychological support on coping strategies and quality os life in infertil couples. Fertility and Sterility, 116(3), e361.
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autor: Miguel García Fernández