Clasificación de la calidad embrionaria (I)

Clasificación de la calidad embrionaria (I)

Seguro que si te has sometido o estás en un proceso de reproducción asistida has escuchado eso de “La calidad de tu blastocisto es tipo A/B/C/D”. Como ya sabemos lo que es un Blastocisto ahora vamos a hablar de los distintos tipos de calidades que pueden tener y cómo los embriólogos los clasificamos.
En este primer artículo os hablaremos de porqué hacemos esta clasificación, qué significa y cuál es el primer factor que tenemos en cuenta.

¿Qué es la calidad embrionaria?

La calidad embrionaria es una valoración que se realiza a los embriones en distintos días de su desarrollo embrionario con la idea de saber cuál tiene mayor capacidad de implantar en el útero y dar embarazo.
Actualmente, la mayoría de los laboratorios en España utilizan la clasificación de ASEBIR (Asociación para el estudio de la biología de la reproducción). Esta asociación nos da una serie de guías basadas en la morfología que nos permiten distinguir unos embriones de otros y saber cuál tiene mayor capacidad de implantación.

¿Qué calidad es la buena y cuál es la calidad mala?

La calidad tipo A tiene mayor probabilidad de implantación que la calidad tipo B y ésta a su vez mayor probabilidad de implantación que la calidad tipo C y ésta mayor que D. Pero todas las calidades tienen probabilidad de dar embarazo.
Debemos entender que las calidades son como un “nombre” que los embriólogos tienen que poner a los blastocistos para poder distinguirlos a unos de otros, pero no debemos de creer que solo los blastocistos de tipo A embarazan y los de tipo C no, porque cuando se realiza la transferencia se transfiere aquello que tiene capacidad para producir un embarazo. Hay transferencias de blastocistos de tipo A que no embarazan y si lo hacen cuando se transfieren blastocistos de tipo C. Con esto queremos indicar que la clasificación es algo subjetivo y que no hay que frustrarse si tenemos un embrión de tipo C o creer que tenemos el embarazo asegurado con un blastocisto de tipo A. El que se produzca o no embarazo depende de muchos factores y no solo de la letra que tenga el blastocisto a transferir. Por tanto no existe una calidad buena y otra mala, existe una mayor probabilidad de dar embarazo o una probabilidad menor.

El grado de desarrollo

Para poder llevar a cabo la clasificación de los embriones lo primero que vamos a tener en cuenta es su grado de desarrollo.
Lo idóneo es que el blastocisto esté empezando a romper la zona pelúcida para salir de ella y pegarse al útero, pero podemos encontrar otros muchos estadios. Los dos estadios de desarrollo embrionario que están asociados con una mejor calidad embrionaria son:

  • Blastocisto en expansión: en este estadio el blastocisto empieza a contraerse y expandirse para hacer la zona pelúcida más delgada con el objeto de romperla y salir de ella para adherirse al útero.
  • Blastocisto eclosionando o eclosionado: en este estadio el blastocisto se está saliendo de la zona pelúcida que lo recubre o ha salido totalmente de ella.
Blastocisto EMBY

Bibliografía

  • The Embryology Interest Group: updating ASEBIR’s morphological scoring system for early embryos, morulae and blastocysts. Med Reprod Embriol Clín. 2018; 5 (1): 42-54. https://doi.org/10.1016/j.medre.2017.11.002
  • Criterios ASEBIR de valoración morfológica de oocitos, embriones tempranos y blastocistos humanos. 3ª ed., 2015. Cuadernos de Embriologia Clínica. https://asebir.com/cuadernos-asebir/
  • Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

    Autora: Carmen Rodríguez Izquierdo

    Genética y reproducción (II)

    Hablemos de genética y reproducción (II)

    Hay una cuestión que aparece recurrentemente en las consultas de reproducción asistida, «si nos hemos hecho el cariotipo y los dos estamos bien… ¿cómo puede ser que nuestros embriones puedan estar mal?»

    Para intentar responder a esta pregunta vamos a seguir desarrollando el tema de la genética y la medicina reproductiva.

    Recordamos el post anterior

    En el resumen del post anterior sobre genética y reproducción concluiamos explicando que todos los seres humanos tenemos 46 cromosomas, ni uno más ni uno menos, esa condición es la que denominamos “euploidía”.

    Entonces introducíamos las palabras «euploide» y «aneuploide». Cuando un individuo (persona, embrión, etc…) tiene 46 cromosomas entonces es euploide, en caso contrario es aneuploide.
    También explicábamos que los gametos, espermatozoides y óvulos, tienen 23 cromosomas para que, al juntarse, se forme un ser nuevo de 46 cromosomas.

    «Pero… ¿Si nosotros somos euploides….?»

    Un individuo, hombre o mujer, que sea euploide, debería tener gametos de 23 cromosomas, pero existen muchas circunstancias que provocan que esto no sea así.
    En primer lugar tenemos que saber que los gametos son células que se generan por división de otras células, en un primer momento esas células tienen 46 cromosomas, pero al final de su diferenciación, cuando ya se van a convertir en los gametos, se dividen en 2 directamente, generando 2 gametos de 23 cromosomas (meiosis).
    En esa última división puede haber un error y que los gametos tengan una carga cromosómica equivocada. Enla imagen siguiente os mostramos gráficamente cómo aparece un error en una meiosis y aparecen 2 ovocitos con 22 y 24 cromosomas respectivamente.

    eje hipotálamo hipofisis ovario

    ¿Podemos saber si un gametos está bien o mal?

    Estaría genial poder seleccionar solamente los gametos euploides cuando hacemos técnicas de reproducción asistida, pero para esto deberíamos, lo primero de todo, poder «diagnosticar» a los gametos. ¿se puede? Si… y no.

    Los gametos concretos que se van a utilizar para generar un embrión, el óvulo y el espermatozoide, no se pueden analizar, ya que habría que destruirlos. Pero sí que podemos hacer algunas cosas antes de llegar a ese momento.

    En el caso del hombre podemos coger espermatozoides antes de los tratamientos y analizarlos para saber cuántos son euploides y cuantos aneuploides. Es normal que todos los hombres tengan un porcentaje de aneuploides (en millones de divisiones alguno siempre falla) pero, si el porcentaje está por encima de un límite, entonces podemos suponer que los espermatozoides que vamos a utilizar para fecundar los óvulos tienen muchas papeletas de ser aneuploides.

    En el caso de la mujer no podemos hacer estos estudios, pero tenemos una estadística mundial que nos indica el porcentaje de embriones aneuploides que esperaríamos encontrar en una mujer cualquiera en función de su edad. Aunque cualquier mujer a cualquier edad puede generar embriones aneuploides, sabemos que según aumenta la edad aumenta ese porcentaje, y a partir de los 38 años ya entramos en zona de peligro.

    Y todo esto… ¿a dónde nos lleva?

    Tanto si encontramos muchas aneuploidías en los espermatozoides, como si la mujer tiene 38 o más años, entonces podemos sospechar que esos embriones que vamos a generar pueden ser aneuploides, y entonces podemos hacerles un diagnóstico directamente.

    Aquí aparecen dos términos que habrás escuchado en la consulta. Biopsia de embriones y diagnóstico genético preimplantacional (DGP o PGT). Os los explicamos.

    El diagnóstico genético preimplantacional es, básicamente, hacerle un cariotipo al embrión y saber si es euploide (46 cromosomas en 23 parejas) o aneuploide (cualquier otra alternativa).

    Para hacerte a ti el cariotipo te sacamos un poco de sangre, en el caso del embrión tenemos que esperar que haya hecho un montón de divisiones y que ya tenga un buen número de células (estadío de blastocito), generalmente esto sucede en el quinto día de incubación, entonces vamos a quitarle unas pocas células (3-7) de la zona del embrión que daría lugar más adelante a la placenta. Para hacerlo, vamos a utilizar varias máquinas del laboratorio (microinyector, láser, microscopio). Esta biopsia no daña el embrión y es la única técnica que existe ahora mismo para poder saber con certeza si el embrión es o no euploide.

    Referencias

    • Scarica, C., Cimadomo, D., Dovere, L., Giancani, A., Stoppa, M., Capalbo, A. & Canipari, R. (2019). An integrated investigation of oocyte developmental competence: expression of key genes in human cumulus cells, morphokinetics of early divisions, blastulation, and euploidy. Journal of assisted reproduction and genetics, 36(5), 875-887.
    • Townsend-Nicholson, A., Bolsover, S. R., FitzHarris, G., Shephard, E. A., Hyams, J. S. & Patel, S. (2022). Cell Biology: A Short Course (4.a ed.). Wiley-Blackwell.
    Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

    Autor: Miguel García Fernández

    El Blastocisto: El rey del laboratorio

    El Blastocisto: el rey del laboratorio

    Si estás sometiéndote a un proceso de reproducción asistida o has pasado por uno de ellos seguro que conoces la palabra BLASTOCISTO, o al menos, te sonará, porque tanto los ginecólogos como los embriólogos están enamorados de los blastocistos.

    Hoy, desde #EMBYBLOG queremos ayudarte a entender por qué nos gustan tantos los blastocistos y cómo sabemos cuándo un embrión ha llegado a convertirse en un blastocisto.

    ¿Qué es un blastocisto?

    El blastocisto es un estadio del desarrollo embrionario del embrión. Este estadio se alcanza entre 5-6 días después de la fecundación. Cuando el embrión llega a convertirse en blastocisto sabemos qué tiene muchas más probabilidades de dar embarazo, porque en ese estadio celular ya existe una diferenciación de células y encontramos las células que darán lugar al bebé que son las que conocemos como masa celular interna y las células que darán lugar a la placenta que son las que se denominan trofoectodermo.

    En la siguiente imagen puedes distinguirlas mejor.

    Blastocisto EMBY

    ¿Todos los ovocitos llegan al estadio de blastocisto?

    Esta es una pregunta que nos han hecho algunos pacientes y creemos que es importante resolverla.

    La tasa de llegada a blastocisto es del 40-60% de todos los ovocitos que se fecunden. Si partimos de 10 ovocitos fecundados, 5 o 6 de ellos llegarán al estadio de blastocisto. La capacidad del embrión para llegar a convertirse en un blastocisto depende de la calidad de los gametos y de las primeras divisiones celulares en los días 1, 2 y 3 de desarrollo embrionario.

    Además, el porcentaje de llegada a blastocisto se reduce drásticamente conforme aumenta la edad de la mujer, pues como es sabido, a partir de los 35 años el porcentaje de aneuploidías aumenta y la reserva ovárica se reduce, de manera que los ovocitos que quedan tienen más dificultades para poder alcanzar el estadio de blastocisto.

    ¿Todos los embriones llegan a blastocisto en día 5 o 6 de desarrollo?

    La llegada a blastocisto es embrión dependiente. Como hemos dicho anteriormente depende de las características morfológicas que tenía el embrión en sus primeras divisiones y también de la calidad de los ovocitos y los espermatozoides.
    Dentro de un mismo ciclo, puede haber embriones que lleguen a blastocisto en día 5, otros en día 6 y en muy raras ocasiones en día 7. Conforme mayor sea el tiempo de llegada a blastocisto peor es la calidad del embrión, pues asumimos que le cuesta más y necesita más recursos para alcanzar el estadio necesario para producir la implantación en el útero.

    ¿Cómo sabemos cuando un embrión se ha convertido en blastocisto?

    Los ginecólogos y embriólogos estamos formados para saber distinguir los distintos estadios celulares del embrión, pero este trabajo nos lo facilita la tecnología time-lapse.

    En clínica EMBY contamos con el sistema Geri+. Una incubadora con compartimentos individuales para cada paciente que cuenta con una cámara que toma una foto del embrión cada 5 minutos. El resultado es un video que nos permite ver cómo ha evolucionado el embrión en cada día de su desarrollo y nos permite seleccionar los blastocistos de mejor calidad para transferir, vitrificar o hacer biopsia de trofoectodermo.

    Conclusiones

    El blastocisto es el estadio celular favorito para los embriólogos y ginecólogos, pero también es el que prefiere el útero, pues la capacidad de implantación aumenta cuando transferimos un embrión que ha alcanzado este estadio de blastocisto.

    Lo mejor para obtener blastocistos de buena calidad es no demorar mucho la maternidad porque la edad hace que la calidad embrionaria sea peor y por ende que la tasa de llegada a blastocisto se reduzca.

    Si sabes que quieres ser madre dentro de algún tiempo y eres menor de 36 años, preserva tu fertilidad para poder cumplir tus deseos genésicos en el futuro sin problemas.

    Referencias

    • Sciorio, R., Thong, D., Thong, K. J., & Pickering, S. J. (2021). Clinical pregnancy is significantly associated with the blastocyst width and area: a time-lapse study. Journal of Assisted Reproduction and Genetics, 38(4), 847-855.
    • Niemann, H., & Seamark, B. (2021). Blastoids: a new model for human blastocyst development. Signal Transduction and Targeted Therapy, 6(1), 1-2.
    Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

    Autora: Carmen Rodríguez Izquierdo

    ¿Voy a sufrir efectos secundarios durante la FIV?

    ¿Voy a sufrir efectos secundarios durante el tratamiento de Fecundación in vitro?

    Una pregunta recurrente de toda mujer que se va a someterse a una estimulación ovárica para un tratamiento de fecundación in vitro o una vitrificación de óvulos, es, que efectos secundarios va a sufrir.

    Es importante aclarar, como hacemos desde las consultas de EMBY, que los efectos secundarios a nivel físico son mínimos, de manera que la mayoría de las pacientes no notan ningún efecto y terminan el proceso teniendo la sensación de que ha sido corto y liviano.

    De otra parte, están la ansiedad y el miedo que sienten muchas de las pacientes, que no son debidos a los fármacos utilizados, sino más bien al hecho de estar realizando un tratamiento para conseguir la ansiada gestación, después de meses o años intentándolo de forma natural o tras otros métodos.

    Enfermeras Reproducción asistida

    ¿Qué efectos secundarios suele producir la medicación que se usa para la estimulación ovárica?

    Los principales fármacos que usamos en la estimulación ovárica y que son comunes a los distintos tipos de estimulación, son las gonadotropinas. Sustancias, que provocan el crecimiento folicular que se desea tanto en el caso de una fecundación in vitro, como en la vitrificación de ovocitos.

    Estos fármacos, son autoadministrados por la paciente, siendo muy fácil de aplicar. Eso sí, siempre y cuando se haya recibido una correcta educación sanitaria, por parte de las enfermeras del centro. En este caso, la posibilidad de que las inyecciones subcutáneas produzcan hematomas o eritemas (enrojecimiento de la piel) es mínima.

    Estos productos producen el crecimiento de los folículos y con él la producción, por parte de los mismos de estradiol, que es la hormona que cada mes producimos las mujeres durante el ciclo. La diferencia, es que, en estos casos, el nivel de estradiol es más alto, ya que, en la estimulación ovárica para FIV o vitrificación, se busca el crecimiento de varios folículos y no sólo de uno de ellos como en un ciclo natural.

    Esto llevará a que los síntomas relacionados con el aumento del estradiol que sufrimos las mujeres en un ciclo natural sean más pronunciados, esto es; flujo vaginal, tensión mamaria, cefalea, pesadez de piernas… En general, estos efectos son notados con más intensidad en aquellas mujeres que los notan ya en su propio ciclo.

    ¿Existen efectos más graves cuando se aplican este tipo de medicamentos?

    El efecto secundario más serio y temido por los médicos de reproducción asistida, es el síndrome de hiperestimulación ovárica.

    La Hiperestimulación ovárica tiene una fase leve, en la que la paciente puede presentar: náuseas, edemas leves, distensión y molestias abdominales, que desaparecen con la menstruación posterior al tratamiento. Y una fase moderada-grave, en la que los síntomas se agravan y pueden llevar a la paciente a una situación más comprometida.

    Para evitar la aparición de este síndrome, los médicos de reproducción asistida, debemos valorar los factores de riesgo asociados, tanto pretratamiento, como durante el tratamiento y adecuar las dosis, los tipos de fármacos y la idoneidad de la transferencia a cada paciente y su tratamiento.

    ¿Existen efectos secundarios a largo plazo de la estimulación ovárica?

    Otra de las preguntas que más realizan las pacientes, es si van a tener a largo plazo más riesgo de algún tipo de cáncer o tendrán la menopausia antes. Ninguna de las dos cosas es cierta.

    La primera, porque el aumento de estrógenos que se produce durante la estimulación ovárica es puntual. Mientras que, los cánceres que tienen su origen en la proliferación maligna de células hormono dependientes, lo hacen tras un largo tiempo de acción hormonal sobre dichas células.

    Y la segunda, porque el crecimiento multifolicular que se produce, se realiza a expensas de folículos que son puestos a disposición del ovario durante ese mes y si no fueran utilizados para la obtención de más de un ovocito, serían destruidos, por un complejo mecanismo de atrofia folicular, para que sólo uno de ellos pudiera ovular de forma natural.

    Referencias

    • Weinig, R. M. & Remohí, J. (2015). Casos clínicos de reproducción asistida e infertilidad (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana.
    • SEF (2014). Farmacoterapia en medicina de la reproducción (1.a ed.). Editorial Médica Panamericana.
    Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

    Autora: Dra. Alicia Francos Pérez

    Genética y reproducción (I)

    Hablemos de genética y reproducción (I)

    El cuerpo de los seres humanos está formado por la unión de diferentes órganos y tejidos, y éstos están formados por unidades muy pequeñas que llamamos células. Podríamos decir que la célula es la unidad fundamental del ser humano. Somos un montón de células bien organizadas.
    Esta organización de nuestras células, lo que somos, lo que hacemos, está determinado por nuestra genética, que podríamos decir que es el libro de instrucciones de las células.
    En las consultas de medicina reproductiva es habitual que surja el tema de la genética reproductiva, y como es un tema farragoso hemos querido hacer esta serie de artículos para intentar aclarar qué es un cromosoma, un gen, el diagnóstico genético preimplantacional y otros términos relacionados.

    La genética en el estudio básico de reproducción

    Todos los seres humanos tenemos 46 cromosomas, ni uno más ni uno menos, esa condición es la que denominamos “euploidía”. Es decir, cuando un ser humano tiene 46 “libros” en sus células es euploide, si tuviera 47, 48, 45… entonces sería “aneuploide”. Ese es el caso del síndrome de Down, síndrome de Edwards, etc. Existen aneuploidías “viables”, es decir que nacen y que se desarrollan, y otras “no viables”, que van a provocar abortos o simplemente no generar embarazo.
    Nosotros, antes de empezar el tratamiento, hemos pedido un cariotipo, la foto de los cromosomas, a los miembros de la familia que van a aportar gametos, es necesario porque tenemos que saber si vosotros sois euploides.

    ¿Cuántos cromosomas tenemos?

    En esa foto de los cromosomas podéis ver que los 46 se organizan en 23 parejitas.
    Todos tenemos una pareja del cromosoma 1, una pareja del cromosoma 2, del 3, y así hasta la pareja de cromosomas 22. Luego hay una última pareja, los cromosomas sexuales, que en las mujeres serán XX y en los hombres XY.
    ¿Por qué tenemos 2 de cada? Muy sencillo, porque una de las copias nos las ha transmitido nuestro padre y la otra nuestra madre.
    En la imagen hemos puesto en diferente color los cromosomas que cada uno de estos personajes ha recibido de su madre o de su padre.

    eje hipotálamo hipofisis ovario

    No me salen las cuentas…

    Pero, ¿si todas mis células tienen 46 cromosomas (23 parejas), cómo pueden mis padres darme cada uno 23 unidades? ¿No deberían los gametos (óvulos y espermatozoides) tener 46 cromosomas? Pues resulta que los gametos (el óvulo de la mujer y los espermatozoides del hombre) son unas células especiales, y en el proceso en el que se forman parten a la mitad la “dotación cromosómica” y por eso solo tienen 1 de cada.

    Un resumen por favor

    Un ser humano normal es euploide, tiene 46 cromosomas en 23 parejas, pero los gametos tienen solo 23 (1 de cada tipo).
    Las células que dan lugar a los gametos (óvulos y espermatozoides) son originalmente células de 46 cromosomas, pero en un momento determinado se dividen en dos células y cada una se lleva la mitad de los cromosomas.
    Luego, al juntarse los gametos del hombre y la mujer es cuando formamos de nuevo una célula de 46 cromosomas que luego se seguirá desarrollando hasta ser un individuo.

    Referencias

    • Townsend-Nicholson, A., Bolsover, S. R., FitzHarris, G., Shephard, E. A., Hyams, J. S. & Patel, S. (2022, 2 mayo). Cell Biology: A Short Course (4.a ed.). Wiley-Blackwell.
    Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

    Autor: Miguel García Fernández

    Endometriosis y reserva ovárica

    Endometriosis y reserva ovárica

    El día 14 de marzo, se celebra cada año el día mundial de la endometriosis, con el objetivo de dar a conocer esta enfermedad que afecta un porcentaje de la población femenina, alterando su calidad de vida y afectando a su fertilidad.
    Desde EMBY queremos poner el énfasis en los efectos de la endometriosis sobre la reserva ovárica, para que las mujeres puedan tomar las mejores decisiones con respecto a su futuro reproductivo, y no se encuentren, en el momento que quieran ser madres, con que no pueden serlo porque no estuvieron correctamente informadas.
    endometriosis

    1- ¿Qué es la endometriosis?

    La endometriosis es una enfermedad benigna, pero altamente destructiva del aparato reproductor. En esta patología, el tejido endometrial (tejido que recubre la cavidad uterina), se coloca y prolifera en otras localizaciones, lo más frecuentemente dentro de la pelvis, pero en ocasiones en localizaciones alejadas (pulmón, cerebro…). De los lugares donde pueden encontrarse los implantes endometriosicos, el más frecuente es el ovario.

    2- ¿Es muy frecuente?

    Se estima que la prevalencia de esta enfermedad es del 3-10% de las mujeres en edad fértil. Aumentando esta prevalencia hasta el 20-40% de las mujeres que presentan esterilidad.

    3- ¿Cómo afecta la endometriosis a la fertilidad?

    La fertilidad, puede verse afectada en las mujeres con endometriosis, por varias causas: afectación en la funcionalidad tubárica, afectación en la capacidad de implantación, afectación en la calidad ovocitaria, pero, sobre todo, por disminución en la reserva ovárica.

    4-¿Porque afecta la endometriosis a la reserva ovárica?

    Hay que entender, que, aunque la endometriosis es una patología benigna, consiste en la proliferación del tejido endometrial en zonas distintas a la que debe hacerlo, esto es, la cavidad endometrial. Si esta proliferación se produce dentro del tejido ovárico, el crecimiento destruye los folículos ováricos, disminuyendo su número y por lo tanto afectando negativamente en la capacidad reproductiva de la mujer.

    5- ¿Se puede saber cuándo un implante endometriósico va a crecer y cuanto lo va a hacer?

    Desgraciadamente, no sabemos cuándo un implante endometriósico comenzará su crecimiento y hasta cuando lo va a hacer.

    6- ¿Cuál sería la mejor recomendación para las mujeres con endometriois y deseo de ser madres, actual o futuro?

    La mejor recomendación para las mujeres con endometriosis es, que sean madres cuanto antes, ya que puede que en un determinado momento la endometriosis no este afectado a su capacidad reproductiva, y pocos meses si lo haga, incluso limitándola de forma importante.
    Sin embargo, no siempre es el mejor momento para tomar esta decisión, por esa razón, cualquier mujer que desee postponer la maternidad, y mucho más las mujeres con endometriosis deben plantearse la vitrificación de ovocitos, lo que permitirá conservar ovocitos antes de que pueda producirse un nuevo brote la enfermedad.

    7-¿Puedo saber en que medida está afectando la endometriosis a mi reserva ovárica?

    Si, la reserva ovárica, puede ser valorada mediante la valoración de un ginecólogo de la reproducción mediante la realización de un recuento de los folículos antrales y la interpretación del valor de la hormona antimulleriana.
    Una vez valorada la reserva ovárica, la mujer que presenta endometriosis, puede tener una mejor visión sobre las opciones reproductivas que existen para ella. Desde buscar la gestación, hasta vitrificar ovocitos.

    Referencias

    • Garcia-Fernandez J, García-Velasco JA. Endometriosis and Reproduction: What We Have Learned. Yale J Biol Med. 2020 Sep 30;93(4):571-577.
    • Tomassetti, C., & D’Hooghe, T. (2018). Endometriosis and infertility: Insights into the causal link and management strategies. Best Practice & Research Clinical Obstetrics & Gynaecology, 51, 25-33.
    Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

    Autora: Dra. Alicia Francos Pérez