Trabajar para disminuir mi nivel de estrés y preocupación
Siempre estamos estresados (y lo sabes), el trabajo, la familia, las preocupaciones, siempre estamos ocupados y muchas veces sobrepasados por las circunstancias que nos rodean.
Es muy fácil decir que hay que relajarse que hay que eliminar la ansiedad, incluso dar consejos que quedan muy bien en un post de Instagram o en un libro de autoayuda y que han demostrado científicamente que no sirven para nada. Lo difícil es encontrar el punto en el que se puede romper ese círculo vicioso.
Existe una relación muy fuerte entre la ansiedad y la alimentación, pero también con el nivel de actividad, ¡y con el microbioma! ¿veis la relación?
Es muy difícil cambiar el trabajo que nos estresa, cambiar a nuestra familia, pero pequeños cambios en la alimentación pueden conducir a cambios en el microbioma, mejorar nuestro estado de ánimo y predisponernos a hacer más ejercicio, el ejercicio nos proporcionará hormonas de la felicidad que nos evitarán tener que “pagar con la nevera” nuestra ansiedad. Además, bajaremos de peso y nos encontraremos mejor, con una mayor autoestima.
Una pequeña acción “quirúrgica” en nuestro estilo de vida, un cambio en la alimentación, un aumento en el ejercicio, un pequeño cambio en algo que nos genera estrés, puede desencadenar un proceso de mejora en los otros aspectos, porque ya veis que alimentación, actividad y estrés van de la mano. Pero… ¿Dónde intervenir? Pues cada persona es diferente, algunas personas necesitan actuar en primer lugar en el ejercicio, otras en la alimentación, otras en varios puntos a la vez. Nuestro consejo es consultar con profesionales que entiendan este proceso de forma global, nutricionistas, psicólogos, entrenadores personales, pero que tengan una visión global y que entiendan que nuestro objetivo personal es mejorar en las tres facetas.