Salud del varón durante los tratamientos de reproducción asistida

Desde EMBY, queremos poner un granito de arena en el #movember, recordando la importancia de un buen diagnóstico médico en las consultas de reproducción.
En muchas ocasiones se limita el estudio del varón a un seminograma y a decidir si los espermatozoides pueden ser utilizados para una microinyección, olvidándose que el testículo y las vías seminales son órganos y estructuras que deben de ser estudiada, puesto que de otra forma, podríamos obviar enfermedades banales pero importantes o no tan banales como un carcinoma de testículo, al centrarnos en el objetivo de obtener embriones para transferir.

¿Es importante un buen diagnóstico médico en los pacientes con alteraciones seminales?

Si, claramente lo es. Si bien, no todos los casos requieren de un estudio más exhaustivo de las causas que producen una alteración seminal.
Las alteraciones seminales leves, si no se acompañan de sintomatología en el varón, pueden ser tratadas sin miedo a que el paciente tenga una patología testicular o de vías seminales. Sin embargo, las alteraciones seminales graves requieren de un estudio mas pormenorizado, ya que el hecho de que el testículo como órgano falle de forma importante en su función de producir la célula reproductiva masculina puede indicarnos que algo más o menos importante puede pasarle.

¿Qué tipo de patologías podemos encontrar en varones con alteraciones seminales?

En ocasiones, los varones ya nos cuentan en su historia clínica las causas que pueden haber propiciado las alteraciones seminales que observamos en el seminograma como cirugías, quimioterapia, radioterapia o enfermedades infecciosas. Sin embargo, en otros casos, el diagnóstico de una alteración seminal severa es el primer signo de que algo está fallando en el complejo entramado que permite un eyaculado normal.
Por un lado, pueden existir alteraciones hormonales que determinan que la función del testículo está alterada. El tratamiento de la causa que produce estas alteraciones puede restablecer la función testicular y conseguir un embarazo natural.
También pueden existir alteraciones orgánicas benignas, que hagan que el testículo no funcione correctamente, como varicocele, hidrocele, quistes testiculares benignos. En estos casos, los andrólogos (urólogos especializados en reproducción) valorarán si su intervención puede mejorar las características del eyaculado.
Y, por último, y en muy escasas ocasiones pueden existir procesos testiculares malignos que determinan un mal funcionamiento como órgano, de modo que la alteración en los valores del seminograma pueden ser el primer signo de su aparición. Por ello desde la reproducción asistida debemos de estar muy pendientes de este tipo de alteraciones, para no dejarlas pasar y sólo pensar en el futuro embarazo. De modo que antes de plantear cualquier tratamiento de reproducción asistida, se debe recomendar una valoración por parte del urólogo, para descartar o diagnosticar lo más precozmente posible la aparición de dicha patología.

Referencias

  • Jamil, S., Shoaib, M., Aziz, W., & Ather, M. H. (2020). Does male factor infertility impact on self‐esteem and sexual relationship?. Andrologia, 52(2), e13460.
  • World Health Organization. (2021). WHO laboratory manual for the examination and processing of human semen. World Health Organization
Doctora Alicia Francos Perez ginecóloga reproducción asistida fertilidad Asturias

Autora: Dra. Alicia Francos Pérez